jueves, 7 de agosto de 2008

BOSSA NOVA EN LA HISTORIA DE LA MÚSICA

Es bueno recordar que el Brasil de la década de 50 vivía un momento de grandes mudanzas y de mucha euforia. Juscelino Kubitschek había sido electo, en 1956, bajo el incisivo lema desarrollista "50 años en 5" y, de hecho, el país experimentó un gran crecimiento económico en ese período, sobre todo con la implantación de la industria automovilística y el avance la urbanización. Al final de la década, el Presidente inauguraba en el centro del país la nueva capital, Brasilia, una ciudad de concepción y arquitectura futuristas. La Selección Brasileña de Fútbol conquistaba, en 1958, su primera Copa del Mundo, al vencer por 5 a 2 a la Selección de Suecia. En el mismo año, Jorge Amado lanzaba Gabriela Cravo e Canela y Gianfrancesco Guarnieri estrenaba en el Teatro de Arena de Sao Paulo su pieza Eles nao usam blacktie, que inauguró un nuevo lenguaje del teatro brasileño. Joao Guimaraes Rosa lanzaba el épico Grande Sertao: Veredas, un hito de la literatura brasileña. El director de cine Nelson Pereira dos Santos estrenaba, en 1957, el film Río Zona Norte, una de las primeras expresiones de lo que vendría a ser conocido como Nuevo Cine Brasileño.
Río de Janeiro, en aquella época la capital de la República y mayor centro cultural del país, vivía un momento de singular florecimiento cultural y artístico. Numerosos músicos y compositores, de la trayectoria de Tom Jobim, Vinicius de Moraes, Tito Madi, Johnny Alf, Dick Farney, Roberto Menescal, Carlos Lira y Ronaldo Bôscoli, para mencionar sólo algunos, y cantoras como Dolores Duran, Elisete Cardoso, Sylvinha Telles y Nara Leao, se dedicaban incansablemente a la búsqueda de algo "nuevo", "moderno", diferente de la "batida" del samba-canción, ritmo que predominaba en la época.
Toda esa efervescencia musical ocurría en la Zona Sur de Río de Janeiro, especialmente en Copacabana, donde el departamento en la Avenida Atlântica de los padres de Nara Leao (en esa época con apenas 12 años de edad) y el bar del Hotel Plaza fueron escenario e incubadoras de grandes sucesos. Sus protagonistas eran jóvenes -muy jóvenes-, cuya mayoría todavía no había cumplido 21 años. Tom Jobim, con poco más de 20 años ya era llamado "maestro", no sólo por su formación musical, sino por el talento que exhibía al frente de su orquesta. Juntamente con Vinicius de Moraes, Tom Jobim ya había compuesto varias canciones de éxito y también la música para la famosa obra de Vinicius -que después se transformaría en film - Orfeu da Conceiçao o, más tarde, Orfeu Negro.
Aunque "modernas" las canciones hasta entonces compuestas, o su manera de cantarlas o tocarlas, todavía no eran "aquello" que vino a llamarse Bossa Nova. A pesar de las inevitables inseguridades al respecto, la mayoría de los músicos, autores e investigadores asocia el nacimiento de la bossa nova al disco de Elisete, la Divina, titulado Cançao do Amor Demais, lanzado en 1958. Para los conocedores y apreciadores de la buena música, había entre las canciones de ese disco mucho más que la voz aterciopelada de Elisete Cardoso. La gran innovación aparecía en dos canciones, o mejor, en el ritmo de la "batida"de la guitarra del baiano Joao Gilberto (que, cuentan, no mereció ni créditos en la contratapa del disco), en Chega de Saudade y Outra Vez de Tom y Vinicius.
A pesar del impacto de la nueva "batida", el temperamento difícil de Joao Gilberto no ayudaba a convencer a las grandes grabadoras a dar una oportunidad al músico, pues consideraban además que Joao Gilberto tenía un volumen de voz "pequeño" comparado con las grandes voces de suceso de esa época, como Anísio Silva o Lúcio Alves. Fue gracias, sin embargo, al esfuerzo incansable del amigo Tom Jobim, que Joao Gilberto consiguió grabar en ese mismo año 1958, un disco compacto en 78 rpm. con Chega de Saudade, de un lado y Bimbom de su propia autoría, del otro. Ese sería el disco en el cual explotaría la bossa nova.
Entre las innovaciones presentadas por Joao Gilberto en su mítico disco Chega de Saudade estaban la nueva batida musical, las nuevas armonías, la nueva división de frases en la melodía, la valorización de las letras de las músicas, de la guitarra como instrumento principal -en lugar del acordeón- y de la voz susurrada -en oposición a las grandes voces predominantes hasta entonces.
El período que siguió al lanzamiento del disco de Joao Gilberto fue de los más ricos en términos de producción musical que Brasil ya tuvo. Al disco compacto, siguió en 1959 la grabación del primer LP de Joao Gilberto, también llamado Chega de Saudade. En 1960, Joao Gilberto grabaría su segundo LP, titulado O Amor, o Sorriso e a Flor.
Una vez identificados el moento de nacimiento y la paternidad del nuevo ritmo poco importaría determinar quién lo bautizó. Pero, el fervor por la nueva moda provocó disputas también respecto a los padrinos. Al final, todos reclamaban algún mérito en la aparición de ese fenómeno. La expresión Bossa Nova, que significa nuevo modo, nueva manera, fue institucionalizada en la letra de Newton Mendonça para la canción Desafinado : "Isso é bossa nova, isso é muito natural". Según Ruy de Castro, uno de los mayores investigadores del movimiento, había tocado, sin embargo, a una anónima secretaria la inclusión de la expresión de la expresión en boletín del Grupo Universitario Hebraico del Flamengo, que convocaba a la juventud de la época para noches regadas de música.
Desde el célebre disco de Joao Gilberto, la música brasileña se transformaría para siempre y alcanzaría gran suceso en el mundo entero. En el recuerdo de Ruy Castro, a partir de mediados de 1958, sólo Tom Jobin compuso y grabó nada menos que sucesos del orden de Meditaçao, Samba de uma Nota só, Discussao, Desafinado, Dindi, A Felicidade, a veces en asociación con Vinicius, a veces con Newton Mendonça o con Alysio de Oliveira. La producción de intérpretes incluía desde grandes y famosos, como Lúcio Alvez, Alaíde Costa y Maysa, hasta novatos como Nara Leao, Quarteto em CY y Tamba Trio.
La bossa nova coleccionó clásicos, de los cuales, sin embargo, el más conocido es sin duda Garota de Ipanema, de Tom y Vinicius, grabada por primera vez en 1962 y transformada en suceso internacional en la versión de Stan Getz, Joao e Astrud Gilberto. Garota de Ipanema fue transformada en el "himno oficial de la bossa nova".
La nueva bossa nova o el nuevo ritmo atravesaron décadas sin envejecer o desaparecer. Al contrario, ese fenómeno musical fue capaz de revigorizarse en momentos de crisis, como en la época de la quiebra de la institucionalidad democrática del país, en 1964. En esa época, cupo a la musa de la bossa nova, Nara Leao, con la grabación del famoso disco Opiniao, dar el paso que comprometería el movimiento musical en el movimiento de oposición política.
Con el pasar de los años, la "garota" continuó adaptándose a las mudanzas y ganó diferentes ropajes: con el disco O Fino da Bossa, Elis Regina le dio mayor extroversión; Caetano, Gil, Gal Costa y Os Mutantes introdujeron la versión Tropicalismo, y compositores e intérpretes del nivel de Chico Buarque, Geraldo Vandré y Egberto Gismonti envolvieron la bossa nova y todas sus variantes en un gran y genial abrazo, uniendo todos los sonidos bajo el ala de lo que pasó a ser conocido como Música Popular Brasileira, la MPB.
La bossa nova continúa hoy siendo tan ejecutada y apreciada en Brasil y en el mundo como hace 50 años atrás. En Río, en Tokio, Nueva York o Lima, canciones como Desafinado, Samba de uma Nota Só, o Garota de Ipanema son tan oídas como cuando tuvieron sus respectivos lanzamientos. Ningún otro estilo musical en Brasil tuvo y continúa teniendo tanta influencia sobre la producción discográfica desde su aparición. Para los que son escépticos al respecto, basta un grito rápido en el "dial" de sus radios.
Al completar 50 años, la Bossa Nova fue descrita como "una cincuenteno, con cuerpito de treinta y alma de veinte". ¡Y es eso mismo!


( Nota: El presente artículo es una reproducción del que aparece con el título de 50 AÑOS DE BOSSSA NOVA, en Brasil Cultural, revista de la Embajada de Brasil en Lima, Año I, N°01, enero-abril 2008. Por su importancia para todos los que amamos la música brasileña, hemos decidido incluirlo en Tierra de todos).